Más allá de las gafas: detectamos disfunciones visuales ocultas
Muchos síntomas como visión borrosa, fatiga ocular, dolores de cabeza, dificultad para concentrarse o bajo rendimiento escolar pueden estar relacionados con un problema optométrico funcional, no necesariamente con la necesidad de gafas.
Por eso, trabajamos con una visión integral que nos permite diagnosticar y tratar disfunciones visuales que a menudo pasan desapercibidas en una revisión óptica convencional.
¿Qué es la optometría y qué tipos existen?
La optometría es una disciplina sanitaria no médica que se encarga del estudio, prevención, diagnóstico y tratamiento de los problemas de la visión. En nuestro centro abordamos tanto la optometría clásica o refractiva (graduación y adaptación visual) como la optometría comportamental, que va más allá de la agudeza visual y se centra en cómo usamos nuestra visión en el día a día.
Optometría clínica y refractiva: medición precisa de la graduación, astigmatismo, presbicia, etc.
Optometría comportamental: analiza cómo la visión se relaciona con el aprendizaje, el equilibrio y el rendimiento visual.
Evaluación binocular: coordinación entre ambos ojos, vergencias y convergencia.
Acomodación: capacidad de enfocar correctamente a diferentes distancias.
Percepción visual: cómo interpretamos lo que vemos (importante en niños).
Este análisis nos permite detectar patrones de compensación postural y diseñar una intervención 100% adaptada a tus necesidades.
¿Qué síntomas puede detectar un examen optométrico completo?
Un examen visual avanzado permite descubrir alteraciones funcionales que pueden afectar a niños, adultos o personas mayores. En muchos casos, problemas no detectados a nivel motor o sensorial visual son los causantes de molestias persistentes.
Síntomas más frecuentes
- Dolor de cabeza al leer o usar pantallas.
- Fatiga ocular o visión borrosa intermitente.
- Bajo rendimiento escolar en niños, especialmente en lectura y escritura.
- Dificultad para mantener la atención visual.
- Visión doble, problemas de enfoque o mala coordinación ojo-mano.
¿Qué es la optometría comportamental?
A diferencia de la optometría clásica, la optometría comportamental se enfoca en cómo se usa la visión, no solo en cuánto se ve. Analiza la relación entre la visión y otras funciones como el aprendizaje, el equilibrio postural o la integración motora.
Es especialmente útil en niños con problemas de lectura, concentración o bajo rendimiento escolar, así como en adultos con fatiga visual por trabajo con pantallas o tras lesiones neurológicas.
Trabajamos con ejercicios personalizados para:
- Mejorar la coordinación entre ojos.
- Reeducar la acomodación (enfoque).
- Estimular la percepción visual.
- Favorecer la integración visual-motora.
Pruebas que realizamos:
- Refracción objetiva y subjetiva (graduación precisa).
- Evaluación de agudeza visual, sensibilidad al contraste y visión cromática.
- Análisis de movimientos oculares (seguimiento, sacádicos).
- Test de convergencia y flexibilidad acomodativa.
- Coordinación binocular y procesamiento visual.
- Pruebas específicas para niños, adultos y deportistas.
¿Por qué elegirnos?
- Especialistas formados en posturología y optometría clínica.
- Equipamiento tecnológico de última generación.
- Enfoque interdisciplinar, colaboramos con fisioterapeutas, podólogos y osteópatas.
- Informes objetivos con evolución medible.
Centro céntrico en Zaragoza, fácil acceso.
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